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martes, 27 de julio de 2010

FULL MOON. (Video de Héctor di donna & emile)

El astro rey, señor del día, sobre el horizonte, bañado por rojizos tonos, agonizaba, en soledad, sus últimas horas, minutos y segundos, acompasando su latido, su pulso sereno, a su mortal soledad; mientras los habitantes de aquella gran ciudad, elevada hacia el cielo con preciosos rascacielos, ajenos a su tragedia: Conducían sus lujosos vehículos sobre el negro asfalto de su diaria cotidianeidad divagando sus silogismos, catarsis matizadas en las maquinaciones de las reacciones esquematizadas para sus nuevos mañanas o simplemente soñando sueños ya soñados al volante, lamidos en las ansias del vacío existencial, repetidos en distintos planos oníricos, repitiéndose en espirales disonantes y repetitivos hasta la saciedad por el simple placer de romper sus agónicas rutinas: Iguales entre iguales, desiguales entre desiguales, ambiguas en sus vacilantes decisiones, torcidas en sus mundanas conductas, rectas en sus roídas moralidades, sensuales en sus manifestaciones espontáneas, sexuales en el placer de sus experiencias corpóreas, amorosas en la verdad de sus palabras, besos y caricias serenadas en los campos de sus reflexiones y hasta locas... Sí, locas en las aristas de la desgracia, éstas últimas, sin lugar a dudas, las más abundantes en aquella colmena humana, en su mayoría, levantada con hormigón y acero.

Por eso nadie se percató del porqué ella se mantenía, frente a su Dios “autoinmolado”: Rígida cual figura pétrea... Estática como el agua en reposo... Ida como viajera del tiempo... Perdida en el anaranjado piélago... Inmutable cual estatua esquematizada... Imperturbable cual ave viajera... Ciega para no observar los rostros de quienes transitaban a sus espaldas, pues ya no le importaba el rodar de sus desplazamientos por aquel puente que meditaba el caudaloso río que recorría su tramo y se perdía en la distancia con la intención de vomitar en el océano la insalubridad de las sustancias inyectadas en su arteria... Sorda ante las pitadas pidiendo paso y hasta muda simplemente porque no quería lastimar con sus quejas a los espíritus sensibles.

«¿Por qué me dejas sola amor? ¿Por qué me abandonas? ¿Por qué no acaricias mi cuerpo con tus cálidos abrazos? ¿Por qué no armonizas el sin sentido de mi vida?» se preguntó a si misma, una vez más, instante en el cual una lágrima recorrió su pálido rostro y, ya ganado el abismo de la noche, saltó desde su fina barbilla precipitándose sobre su pecho y tras ganar el canal de sus turgentes senos se mezcló con aquel frío sudor exhalado por su curvilíneo cuerpo, un sudor ácido como el aliento de su existencia perfumada con finas mentiras.

Sin dudas, fría cual témpano de hielo desgajado de la masa gélida de la agonía final, subió a la barandilla de protección de aquel puente, nexo entre distintas conciencias, puso sus brazos en cruz y su blanco vestido de seda agitó, con la brisa, la bandera de su decisión. Después saltó al vacío.

«Pronto estaré contigo, mi amor. No sufras más por mí» dijo según caía vertiginosamente al agua...

Nadie lloró por ella, ni nadie la echó en falta mientras su cuerpo navegaba, boca abajo, transportado por la corriente, dejando detrás de él una estela plateada de seda, hacia el mar. Estela perdida en el horizonte y lugar donde el alma, descarnada de su mortalidad, libre del dolor, de sus ataduras mundanas, subió al cielo en forma de luna llena para desde el firmamento velar por la suerte de los que no le ven sentido a su vida: Porque son torturadas/os por miserables de distintas edades y condición, difamadas/os por los que no ven la paja en su ojo, perseguidas/os por los que no toleran la libertad plena, calumniadas/os e injuriadas/os por los que más tienen que callar, vejadas/os y ultrajadas/os por los que no tienen escrúpulos, machacadas/os y vilipendiadas/os por los déspotas de este mundo, esclavizadas/os y sodomizadas/os por las mafias...

Sí, sólo por ellos brilla y brillará en las noches de profundas dudas.

Alejandro Dieppa León.

Para escribir este cuento me he inspirado en el vídeo de los músicos, Héctor Di Donna & EmileFULL MOON” http://www.youtube.com/watch?v=axQ59hSRGa4&feature=email

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